MÁLAGA, diez Feb.
Agentes de la Policía Nacional han detenido a un joven de 19 años por su presunta compromiso en tres delitos de latrocinios con crueldad o intimidación realizados contra tres mujeres en el polígono Guadalhorce, en Málaga.
El sospechoso, que tenía un trabajo de distribuidor en la región, se acercaba a sus víctimas en una furgoneta y, tras negociar las condiciones del servicio que éstas ofrecían, las animaba a subir al vehículo, procediendo a desvalijarlas en las inmediaciones, al terminar el comportamiento sexual, han correcto desde la Policía Nacional en un aviso.
Según la investigación, el detenido, que ha ingresado en prisión provisional por orden de la autoridad judicial competente, dió una paliza a entre las mujeres, que opuso resistencia al ataque, y otras 2 padecieron cortes y lesiones punzantes con un cuchillo.
La operación 'Opinel', que fué llevada a cabo por agentes adscritos al conjunto de investigación de la Comisaría de Distrito Oeste, se inició después de las demandas, por hurtos violentos, de tres mujeres que dan servicios de compañía en el polígono Guadalhorce.
Las víctimas, en sus manifestaciones, vinieron a encajar en la descripción física del asaltante, tal como en los datos del vehículo en el que se desplazaba, que era una furgoneta blanca.
Los ataques tuvieron sitio en las últimas semanas, uno aun en horario diurno. El modus operandi usado en todos y cada uno de los casos empezaba con un primer contacto del joven con las víctimas desde el vehículo. Así, tras negociar las condiciones del servicio y también invitarlas a subir al vehículo para dirigirse a un espacio mucho más guardado, el sospechoso sostenía relaciones con ellas y, al término, extraía un arma blanca para perpetrar los latrocinios.
Según los datos recabados, entre las víctimas padeció una paliza a manos del asaltante, que la arrastró múltiples metros por el suelo --en un parte médico aportado por la perjudicada se recogen lesiones en las rodillas, aparte de magulles por diferentes unas partes del cuerpo--. Otras 2 víctimas presentaron fotografías donde tienen la posibilidad de apreciarse cortes y lesiones punzantes provocados con un cuchillo, en manos y cuello.
En entre los ataques, el sospechoso llegó a conseguir el poder de 500 euros que portaba entre sus pertenencias entre las víctimas. Tras duras trabajos de investigación, los agentes identificaron y detuvieron al presunto responsable de los hechos, al que se atribuyen tres delitos de hurto con crueldad o intimidación.
Las víctimas identificaron a su atacante en la pertinente diligencia de reconocimiento. Los estudiosos no desechan que existan mucho más víctimas, más allá de que hasta el día de hoy unicamente se han interpuesto tres demandas. De los hechos conoce el Juzgado de Instrucción número 7 de Málaga.