El consejero de Justicia, Administración Local y Función Pública en Andalucía, José Antonio Nieto, ha instado al Gobierno central a reorientar el Pacto de Estado contra la violencia de género. Nieto rechaza lo que él llama una "tendencia al ombliguismo excesiva" por parte del Ejecutivo y exige que se escuche a las comunidades autónomas, que según él están en la primera línea para abordar este problema de manera más colaborativa y leal.

Nieto afirma que Andalucía tiene una perspectiva sobre la violencia de género que le gustaría transmitir al Gobierno con más frecuencia. Destaca que hay puntos del Pacto de Estado que no funcionan, como las medidas de protección de la mujer, donde el Estado tiene competencia exclusiva a través de la Policía y la Guardia Civil. Según el consejero, si la información obtenida por estas fuerzas se compartiera con las comunidades autónomas, se podría tener un mejor control y seguridad para las mujeres.

Estas declaraciones se dieron durante una reunión en Sevilla con el Consejo Asesor a Víctimas de Andalucía. Nieto señala que la violencia de género tiene un peso significativo en el Servicio de Asistencia a Víctimas de Andalucía (SAVA), donde el 54% de las víctimas atendidas son víctimas de violencia machista. Destaca que el perfil de estas víctimas es mayoritariamente femenino, con un 75% de mujeres.

El consejero detalla que las víctimas suelen ser mujeres jóvenes con poca educación, entre 25 y 35 años, que mantienen una relación compleja con el agresor. En este sentido, enfatiza en la importancia de utilizar la información del SAVA para implementar medidas preventivas y detectar la situación de manera temprana.

Nieto explica que las víctimas reciben una atención integral a través de un equipo multidisciplinar en el SAVA, donde se busca normalizar la situación y brindar seguridad. Destaca que el 80% de las mujeres que acuden al sistema de atención de víctimas en Andalucía acaban denunciando.

El consejero destaca que la lucha contra la violencia de género es el gran desafío de la sociedad, y señala a España como líder en esta lucha, con menos casos que la mayoría de países vecinos.