El sector agrícola y ganadero de la bella provincia de Cádiz ha soportado un duro golpe a causa de la reciente DANA que azotó la región la semana pasada. Desde la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja Cádiz), se han emitido estimaciones que indican pérdidas preliminares que rondan los 25 millones de euros, siendo la campiña de Jerez la más afectada por este fenómeno meteorológico, generando un llamado urgente a la mejora de las infraestructuras hídricas críticas para la producción agrícola en la zona.

El secretario general de Asaja Cádiz, Luis Ramírez, ofreció detalles a Europa Press, especificando que de los 25 millones de euros en pérdidas calculadas, aproximadamente 16,5 millones corresponden a daños en las explotaciones agrícolas y ganaderas. El resto, suma 8,5 millones, representa los daños sufridos en infraestructuras que son esenciales para el desarrollo del sector.

Las intensas precipitaciones que caracterizaron el paso de la DANA inundaron varias plantaciones, afectando gravemente cultivos como zanahorias, brócoli y boniatos. Luis Ramírez destacó que cayeron alrededor de 160 litros en solo 48 horas, lo que ha puesto de manifiesto la carencia de infraestructuras adecuadas. Reclamó la urgente necesidad de establecer una conexión entre los embalses de Arcos y Guadalcacín para evitar que el agua desalojada del primero se pierda en el río Guadalete y no pueda ser aprovechada en el segundo embalse. Esta es una demanda que los agricultores han estado propagando durante décadas sin respuesta satisfactoria.

El responsable de Asaja explicó que el embalse de Arcos se mantiene normalmente al 93% de su capacidad. Sin embargo, cuando ocurren lluvias fuertes que exigen el desagüe, el agua se desvía directamente hacia el río Guadalete y, finalmente, al mar. Esta situación no solo se traduce en pérdidas significativas de agua, sino que además provoca detrimentos al inundar áreas agrícolas y afectando a las viviendas cercanas.

Esta creciente cota del Guadalete también tiene consecuencias para la seguridad de los ciudadanos, ya que obliga a llevar a cabo desalojos preventivos de vecinos en zonas rurales de Jerez. A este respecto, Luis Ramírez ponderó que el calentamiento del pantano de Arcos debería haberse realizado un día antes, comprendiendo que las previsiones meteorológicas eran conocidas desde el 30 de octubre anterior.

Asimismo, Ramírez lamentó la deplorable condición de los cauces de arroyos y canales en la comarca, los cuales están en un estado crítico por la falta de mantenimiento y limpieza. Esta negligencia ha llevado a que se desborden incluso con lluvias de menor intensidad, no solo en episodios extremos como fue esta DANA.

En lo que concierne a los cultivos, Ramírez comentó que la campiña de Jerez ha sido la más golpeada por esta DANA. Los cultivos leñosos, incluidos cítricos, olivos, almendros y aguacates, han sufrido inundaciones importantes. Particularmente, alertó sobre la vulnerabilidad de los cultivos jóvenes, que son sensibles a la falta de oxígeno en las raíces cuando están sumergidos en agua por más de 24 horas, lo que puede resultar en su pérdida total. Además, cultivos de hortalizas, incluyendo zanahorias, brócoli y boniatos, se encuentran igualmente anegados, mientras que unas 2.000 hectáreas de algodón que debían ser cosechadas han quedado completamente inutilizables.

La situación también ha impactado a las explotaciones ganaderas de vacuno de leche, donde la inexistencia de accesos ha ocasionado que se pierda cantidad significativa de leche que no pudo ser recolectada a tiempo.

Las primeras estimaciones de Asaja apuntan a que las pérdidas en las explotaciones agrícolas y ganaderas de Jerez ascienden a la impresionante cifra de 25 millones de euros. En este contexto, Luis Ramírez ha señalado que están trabajando para que las autoridades competentes, en el próximo Consejo de Ministros, consideren a Jerez como "zona catastrófica", incluyendo la zona rural, para que se implementen ayudas económicas que compensen estas pérdidas, ya sean ayudas fiscales o laborales que alivien la carga de los afectados.

Finalmente, el representante de Asaja Cádiz expresó su profunda consternación por lo que ha sucedido en Valencia, recordando que su organización a nivel nacional se ha ofrecido para apoyar a los agricultores y ganaderos de esa comunidad autónoma con asistencia económica. "Asaja, como organización, también se está volcando con la situación de nuestros amigos en Valencia", concluyó.