En una acción contundente contra el narcotráfico, la Agencia Tributaria ha llevado a cabo en Cádiz una serie de operaciones que resultaron en la incautación de más de 11.000 litros de combustible, así como tres embarcaciones y una furgoneta. Estas operaciones están destinadas a desmantelar las redes logísticas que ayudan a las organizaciones criminales dedicadas al tráfico de drogas en la región.

La primera intervención tuvo lugar en el río Guadalete, donde los agentes de Vigilancia Aduanera detectaron un movimiento sospechoso de abastecimiento de combustible a lanchas rápidas. Al establecer un operativo de vigilancia, identificaron una furgoneta de grandes dimensiones que se acercó al río de manera rápida. Al intentar detenerla, sus ocupantes huyeron, pero los agentes lograron inspeccionar el vehículo, hallando 163 garrafas de combustible. El vehículo, que había sido reportado como robado, fue incautado junto con su carga.

En la segunda operación, también en el Guadalete, los agentes dieron con dos embarcaciones implicadas en el transporte de combustible. Una de las embarcaciones fue interceptada por el patrullero 'Peregrino I', mientras que los responsables de la otra decidieron hundir su embarcación para evadir la captura. Aunque los tripulantes lograron escapar gracias a la asistencia de una lancha semirrígida, se incautaron 88 garrafas de gasolina.

La tercera intervención tuvo lugar en Chiclana de la Frontera, en el caño Sancti Petri. Allí, los agentes encontraron embarcaciones relacionadas con el suministro de gasolina a narcolanchas. Al verse acorralados, los tripulantes se deshicieron de 109 garrafas de combustible en su intento por escapar, pero las autoridades lograron recuperar el material inflamable.

La última operación se llevó a cabo en la desembocadura del río Guadalete, donde fueron localizadas dos lanchas que abastecían a una semirrígida. Ante la llegada de los agentes, los tripulantes lograron escapar en la semirrígida, abandonando las dos lanchas y su carga de 86 garrafas. En total, las operaciones han permitido incautar 446 garrafas, que contienen más de 11.000 litros de gasolina, frustrando así el suministro a las narcolanchas.

Las investigaciones continúan y no se descartan futuras detenciones. Según la Agencia Tributaria, estas acciones son fruto de un trabajo de inteligencia y colaboración entre las unidades de Vigilancia Aduanera de Investigación y el Servicio Marítimo de Vigilancia Aduanera, que han utilizado tecnología de avanzada para seguir y localizar a los implicados en este ilícito comercio.

Es importante señalar que el manejo, transporte o comercialización indebida de sustancias inflamables representa un grave riesgo tanto para la vida humana como para el medio ambiente, pudiendo conllevar penas de prisión según el Código Penal. La Agencia Tributaria ha instado a las gasolineras y empresas de hidrocarburos a ser diligentes en la entrega de estos materiales y a reportar cualquier actividad sospechosa que podría acarrear consecuencias legales severas.