Agentes de la Policía Nacional han detenido en La Línea de la Concepción (Cádiz) a otras dos personas acusadas de atentar contra agentes de la autoridad, provocarles lesiones y dañar el mobiliario urbano. Los hechos ocurrieron cuando los agentes fueron a detener a dos investigados por presunto tráfico de droga en la barriada de Las Palomeras y los detenidos por la agresión ascienden ya ocho personas.
En relación a estos incidentes ocurridos el pasado 4 de septiembre, la Policía ha informado que próximamente se llevarán a cabo más detenciones. Cabe destacar que cinco de los detenidos ya se encuentran en prisión por los disturbios ocasionados en la barriada de Las Palomeras.
El operativo de la Policía Nacional tenía como objetivo localizar y detener a dos individuos investigados por tráfico de drogas en la barriada de Las Palomeras. Luego de ubicar a los dos individuos, los agentes procedieron a su arresto, pero los residentes de la zona se opusieron de manera enérgica, obstruyendo la intervención policial y tratando de ayudar a la fuga de los sospechosos.
Finalmente, los detenidos fueron introducidos en vehículos policiales para ser trasladados a la comisaría. Mientras abandonaban el lugar, los vecinos congregados comenzaron a lanzar piedras y otros objetos, hiriendo a dos agentes y dañando múltiples vehículos policiales. Además, durante la noche, se produjeron más disturbios, altercados y quema de contenedores en las cercanías de Las Palomeras, resultando herido un tercer agente que se encontraba reforzando la zona afectada.
Los dos detenidos fueron llevados a la Comisaría de La Línea de la Concepción y posteriormente puestos a disposición judicial, resultando en el ingreso a prisión de uno de ellos. A través de investigaciones policiales, se logró la identificación de aquellos ciudadanos que causaron daños al mobiliario urbano, profirieron insultos, lanzaron piedras o incitaron a los demás a agredir a los agentes.
El 14 de septiembre, tras recabar todas las pruebas necesarias, agentes de la Policía Nacional llevaron a cabo las primeras detenciones relacionadas con estos hechos. Seis detenidos fueron puestos a disposición judicial, decretándose el ingreso en prisión de cinco de ellos por los disturbios públicos causados, así como por las lesiones provocadas por los lanzamientos de piedras contra los agentes y los daños al mobiliario urbano, valorados en más de 50.000 euros.