El Ayuntamiento de Sevilla ha presentado nuevas propuestas de ordenanzas fiscales para el año 2024, que supondrán un importantísimo ahorro de 4 millones de euros para los sevillanos. Se contempla una reducción generalizada del 1% en los impuestos locales, así como una congelación de las tasas municipales. Esto afectará al IBI, al impuesto de vehículos de tracción mecánica, a la plusvalía, al IAE y al ICIO, los cuales se verán disminuidos en dicho porcentaje. Además, se establecerá una nueva tasa de 116,63 euros para las bodas celebradas en el Consistorio.
El delegado municipal de Hacienda, Juan Bueno, ha dado a conocer estas medidas en una rueda de prensa celebrada en el Ayuntamiento. Según Bueno, la propuesta busca realmente disminuir la carga fiscal, a diferencia de gobiernos anteriores que simplemente aplicaban el índice de precios al consumo. Cabe destacar la "mejora técnica" en la ordenanza fiscal para el cementerio, con el fin de ajustar las tasas al coste real para el Ayuntamiento. Sin embargo, esta medida solo afectará a seis de los 45 epígrafes contemplados.
El equipo de gobierno también propone la creación de dos nuevas tasas. La primera se aplicará a la ocupación del subsuelo y/o vuelo por parte de las redes de suministro de telefonía móvil, que hasta ahora no existía en Sevilla pero sí en otras grandes ciudades españolas como Madrid, Barcelona, Málaga, Valencia o Zaragoza. Las compañías telefónicas deberán abonar este impuesto como pago por el uso de un espacio público. La segunda tasa se establece para cubrir los costes del servicio de bodas ofrecido por el Ayuntamiento. Bueno dejó claro que esta medida busca que los ciudadanos que utilicen el servicio sean quienes lo costeen, en lugar de que todos los sevillanos lo paguen a través de los presupuestos municipales. La tasa será de 116,63 euros por boda y tendrá exenciones para los mayores de 65 años y desempleados.
En cuanto a los precios públicos, la única modificación se realizará en algunas tarifas del Alcázar para eliminar la diferencia entre las entradas adquiridas en taquilla y por Internet. Con ello, se pretende fomentar la compra online y brindar un mejor servicio, evitando las largas colas en el Alcázar.
Además, se modificarán las tarifas por el uso del recinto monumental, introduciendo una escala y distinguiendo según los espacios utilizados. Bueno afirmó que, como se había prometido, las nuevas ordenanzas fiscales contarán con mejores y más amplias bonificaciones que las vigentes. Por ejemplo, se ampliará el número de familias numerosas que podrán beneficiarse de bonificaciones en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), elevando el nivel de renta de 60.000 a 80.000 euros por familia.
Las ordenanzas también incluyen una bonificación de la plusvalía "mortis causa", que se amplía a descendientes, ascendientes o cónyuges. Esto permitirá aplicar la bonificación a todos los inmuebles que no estaban contemplados anteriormente, dentro de los límites globales de la herencia. Bueno explicó que, por ejemplo, si una persona lega un local a una ONG o a una hermandad para fines sociales, estas entidades solo deberán pagar el 20% de la plusvalía, reduciendo así el importe total.
En resumen, estas nuevas medidas fiscales podrían suponer un importante ahorro de cuatro millones de euros para los ciudadanos de Sevilla. El proyecto de ordenanza será presentado al Consejo Económico y Social de Sevilla y a los distintos grupos municipales para su evaluación, con el objetivo de que entre en vigor el 1 de enero.