Solicita explotar la novedosa reforma del tratado de defensa con EEUU por los nuevos destructores para ingresar garantías de empleo
SEVILLA, 30 Jun.
El comité de compañía de KBR, la sociedad adjudicataria del contrato de las Fuerzas Aéreas de Estados Unidos en Europa para los servicios de ingeniería civil, acompañamiento logístico, salud y también higiene industrial de la base aérea de Morón de la Frontera (Sevilla), cuyo empleo distribuyen España y Estados Unidos, ha festejado una videoconferencia con la asesora de Estado de Defensa, Amparo Valcarce, en demanda de reformar el tratado de defensa entre los dos países para ingresar garantías de empleo ligadas a la presencia militar estadounidense.
Y sucede que como es conocido, KBR fomenta un expediente de regulación de empleo (ERE) para extinguir 54 puestos de empleo de la plantilla de españa de la base de Morón.
José Armando Rodríguez Ardila (UGT), presidente del comité de compañía de KBR, explicó a Europa Press que ya que la resolución de Estados Unidos de desplegar 2 destructores mucho más en la base aeronaval de Rota (Cádiz) para remarcar el escudo antimisiles de la OTAN implicará "una exclusiva enmienda" al mencionado tratado bilateral de defensa entre España y Estados Unidos, es requisito explotar esa coyuntura para "progresar el anejo de relaciones laborales" de tal artículo.
En preciso, se trataría de plasmar garantías de empleo local por la presencia militar estadounidense, tal como una "uniformidad de método" en el momento del régimen de las plantillas de las bases de Rota y Morón, de empleo compartido entre España y Estados Unidos.
Para esto, el comité de compañía, adjuntado con el secretario general de UGT-Sevilla, Juan Bautista Gines, y el secretario general de UGT FICA Sevilla, Manuel Ponce, ha movido a Valcarce un "archivo jurídico", ahora entregado por la representación de la plantilla a los causantes de los ministerios de Trabajo y Economía Social y de Asuntos exteriores, Unión Europea y Cooperación.
Además, el comité de compañía prevé festejar este jueves la tercera asamblea con la dirección de KBR, en el marco del periodo de tiempo de consultas del mencionado ERE.
En esa negociación, el comité de compañía demanda achicar el número de despidos por el hecho de que "hay bastante carga de trabajo"; eludir los "despidos traumáticos" a través de la aceptación de "voluntarios" prestos a ser incluidos en el ERE; actualizaciones en el plan popular y que las indemnizaciones se eleven a las máximas por despido improcedente, esto es 45 días al año de servicio hasta la reforma laboral de 2011 y de 33 días desde entonces.
A tal efecto, tengamos en cuenta que el pasado otoño, Estados Unidos transfería a Italia el contingente militar de reacción rápida en África que hasta el momento operaba en la base aérea de Morón, que fruto de una enmienda al tratado bilateral de defensa entre Estados Unidos y España, había sido habilitada como base persistente de la fuerza militar de norteamérica de despliegue veloz en África.
En esa enmienda, además de esto, los dos países acordaron agrandar a un total de 36 aeronaves, 2.200 militares y 500 expertos civiles el techo de presencia de Estados Unidos en tal base.
En el momento en que Estados Unidos optó por mover desde la base de Morón a Italia su contingente de reacción rápida en África, José Armando Rodríguez Ardila defendía que tal traslado no tendría "por qué razón tener encontronazo" en la plantilla de españa de la base, razonando que si la llegada de los efectivos de la fuerza de reacción rápida en África allí por 2013 no se tradujo en la contratación de sobra personal civil para llevar a cabo en frente de la situación, en este momento "no posee por qué razón haber" secuelas negativas en temas de empleo.
En ese marco, recordaba que el aumento de la presencia estadounidense en esta base cuyos servicios civiles administran compañías elegidas por las Fuerzas Aéreas de Estados Unidos en Europa y África, había ido acompañado de una reducción progresiva del personal español adscrito a semejantes servicios de ingeniería civil, acompañamiento logístico, salud, ambulancia, higiene industrial o servicios postales.
El comité de compañía de los nombrados servicios civiles, en ese sentido, transporta años denunciando con insistencia una supuesta estrategia ya establecida de substitución del personal español por expertos estadounidenses o de manera directa militares de tal país.
No sobra rememorar tampoco que KBR formaba una parte de la sociedad Vinnell-Brown