Un juez ha dictado una medida cautelar de 200 metros de alejamiento e incomunicación para un enfermero acusado de besar sin consentimiento a una compañera durante una pausa para el café en unas jornadas informativas celebradas en Almería. La afectada denunció los hechos ante la Policía Nacional, alegando un presunto delito de agresión sexual y acoso laboral. Según fuentes del caso, la mujer también mencionó insinuaciones de índole sexual anteriores por parte del acusado.
El incidente habría ocurrido durante la mañana de las jornadas, cuando la víctima y el denunciado salieron de la sala acompañados de otras personas. Se dice que el hombre se estaba sonando la nariz y la mujer, en tono de broma, le dijo que se alejara por si tenía covid. Según la versión de la afectada, el hombre la agarró fuertemente de la cara y el cuello, acercó su rostro y la besó en la boca en contra de su voluntad. La mujer afirmó haber sufrido dolencias en el cuello como resultado de este acercamiento.
El denunciado admitió haber besado a la mujer, pero aseguró que fue en la mejilla como parte de la misma broma. Un testigo corroboró ante la policía que el beso se produjo en los labios. El hombre negó cualquier discrepancia anterior con la afectada y confirmó el comentario sobre sonarse los mocos y la posibilidad de tener covid. Según su versión, la besó y luego le dijo que era alergia.
El hombre reconoció que su acción, vista como una broma por su parte, no fue bien recibida por la afectada y aseguró que se disculpó con ella. Sin embargo, sostuvo que no la forzó. También afirmó haberse realizado una prueba de covid durante el día y haber informado a un superior jerárquico sobre los resultados. La investigación sigue en curso.