La alcaldesa de Jerez de la Frontera, María José García-Pelayo, perteneciente al Partido Popular, ha expresado su profunda preocupación este miércoles por la exclusión de su ciudad en el reciente decreto del Gobierno de España, publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE), que contempla compensaciones por los daños causados por la DANA. Este hecho ha generado una gran controversia y ha suscitado reacciones de indignación entre los ciudadanos y las autoridades locales.

García-Pelayo ha calificado esta decisión como "lamentable", destacando su firme intención de luchar para que se reconsidere la inclusión de Jerez en la lista de municipios que deben recibir apoyo económico. En una entrevista en Canal Sur Televisión, recogida por Europa Press, la alcaldesa se comprometió a trabajar incansablemente para revertir esta situación y asegurar que su ciudad obtenga la compensación que merece.

La magnitud de los daños en Jerez ha sido considerable, alcanzando un total aproximado de "39 millones de euros". Estos daños incluyen no solo las inundaciones que afectaron a calles, comercios y viviendas en el núcleo urbano, estimadas en unos nueve millones de euros, sino también las devastadoras pérdidas en el sector agrícola y la zona rural. Las organizaciones agrarias locales, como Asaja y COAG, han elevado la cifra de daños económicos en el campo a 30 millones de euros, lo que subraya la gravedad de la situación.

En su declaración, la alcaldesa hizo hincapié en el respeto y la solidaridad hacia las comunidades de la Comunidad Valenciana, que también han sufrido las consecuencias de la DANA, pero enfatizó que Jerez tiene derecho a recibir compensación por el daño que ha padecido. "Nada se puede comparar, por supuesto, pero también hemos vivido nuestro propio drama meteorológico", aseveró García-Pelayo, resaltando la necesidad de un apoyo equitativo.

En contraposición a la situación a nivel nacional, García-Pelayo mencionó el decreto de la Junta de Andalucía, que ha asignado 72 millones de euros para ayudar a los municipios afectados. Resaltó que esta medida ha sido implementada "con bastante justicia", ya que los fondos se han distribuido de manera proporcional entre los 285 ayuntamientos perjudicados, marcando este gesto como un primer paso importante para la recuperación.

La situación en la campiña de Jerez ha sido igualmente crítica, con daños agrarios cuantificados en 30 millones de euros por organizaciones como Asaja y COAG. La alcaldesa subrayó la importancia de un paquete adicional de ayudas para arreglar caminos rurales y apoyar a los agricultores, considerando que la recuperación del sector agrícola es fundamental para la economía local.

García-Pelayo también enfatizó la necesidad de tomar lecciones de esta situación adversa, indicando que es crucial estar preparados para futuros eventos similares. La alcaldesa manifestó que la alerta por desbordamiento del río Guadalete y la evacuación de más de 200 vecinos residen en zonas vulnerables son claras evidencias de que deben implementarse medidas preventivas con urgencia.

Además, hizo un llamado a la responsabilidad sobre el cuidado de los ríos y la limpieza de cauces, sugiriendo que debería haber un cambio significativo en la forma de abordar el urbanismo en áreas propensas a inundaciones. Como presidenta de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), García-Pelayo reconoció que su capacidad para regular la construcción en ciertas áreas es limitada, aunque apuntó que se están destinando más de dos millones de euros para mejorar la infraestructura hídrica en Jerez.

En cuanto a la ola de solidaridad que ha surgido a nivel nacional, la alcaldesa destacó que, a pesar de ser "el Ayuntamiento con más deuda de España", es su deber ayudar a los afectados por la DANA. Argumentó que, si su administración puede colaborar en este contexto, es imposible que el Gobierno de España no actúe con la misma responsabilidad y compromiso.

Por último, García-Pelayo subrayó que no solo es imprescindible la ayuda económica, sino que también existe un componente emocional que debe ser considerado. La solidaridad expresada por policías, bomberos y ciudadanos que han acudido a prestar asistencia en las zonas más devastadas ha sido conmovedora. “Esto no es sólo cuestión de dinero, sino de sentimientos y de facilitar la recuperación”, concluyó, reflejando la dureza de la situación que atraviesa la comunidad jerezana.