GRANADA, 9 Nov.

Agentes de la Jefatura Provincial de Granada de la Unidad de la Policía Nacional Adscrita a la Comunidad Autónoma de Andalucía han detenido a un menor de 16 años acusado de delitos contra la libertad sexual, contra la intimidad y de coacciones, todos ellos cometidos sobre una chica de 13 años, a la que habría amenazado con difundir sus fotos y vídeos sexuales por redes sociales.

Según ha informado la Junta en una nota de prensa este jueves, la detención tuvo lugar el pasado 18 de octubre. Los hechos ocurrieron cuando la menor conoció a través de internet al ahora detenido y mantuvo con él una breve relación sentimental. Durante ese tiempo, ambos intercambiaron fotografías y vídeos de naturaleza íntima.

Los investigadores descubrieron, poco después de iniciar este tipo de intercambio de material explícito, que la menor decidió no enviar más fotos o vídeos. Sin embargo, el detenido no aceptó esta decisión y la amenazó con difundir el material que ya tenía a través de las redes sociales.

Ante la amenaza y el temor real de que las imágenes y vídeos sexuales pudieran circular por internet y ser reconocida por sus seres queridos, la menor se sintió coaccionada y accedió a enviar nuevos vídeos de índole sexual al agresor.

Para detener esta práctica, la joven decidió interrumpir toda comunicación con el autor de los hechos, bloqueándolo de sus contactos. Sin embargo, la respuesta del ahora detenido fue difundir el material a través de una aplicación de mensajería instantánea.

Ante la evidencia de que imágenes de contenido sexual de la menor estaban circulando en las redes sociales, los familiares denunciaron los hechos ante el Área de Protección al Menor de la Unidad de la Policía Nacional Adscrita a la Comunidad Autónoma de Andalucía.

Los agentes iniciaron de inmediato una investigación del entorno de la menor y de las redes sociales, lo que llevó a la identificación y posterior detención del autor por los delitos mencionados. Los hechos han sido trasladados a la autoridad judicial.

Este tipo de delito se conoce como "sextorsión" y está estrechamente relacionado con una práctica común entre adolescentes de entre 12 y 16 años, y en menor medida entre adultos, conocida como "sexting". Consiste en el envío de imágenes o vídeos de carácter íntimo para su difusión en redes sociales, principalmente a través de aplicaciones de mensajería instantánea.