El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha dado un plazo de diez días al Ayuntamiento de Carboneras (Almería) para que aporte una "certificación" que demuestre que el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) en vigencia cumple correctamente con la sentencia que dicta que el paraje de El Algarrobico, donde se encuentra el hotel de Azata, debe ser calificado como "suelo no urbanizable" y de "especial protección".
En un auto, al que tuvo acceso Europa Press, la sala ha requerido al ayuntamiento de Carboneras toda la información relevante del planeamiento urbano actual que indique el cumplimiento adecuado de la resolución judicial, la cual es definitiva desde 2018. Sin embargo, se ha desestimado el recurso presentado contra la decisión de no sancionar al alcalde del municipio presentada por Greenpeace, Salvemos Mojácar y Ecologistas en Acción, alegando que la sentencia no ha sido ejecutada.
El TSJA reitera sus razones para rechazar el recurso de los grupos conservacionistas, argumentando que no se ha declarado la nulidad de la acción meramente formal realizada por el Ayuntamiento, en referencia al acuerdo de pleno de abril de 2023 que desclasificaba como urbanizable el sector ST-1 o Algarrobico.
El tribunal exige que cualquier reclamación de incumplimiento se refiera al contenido del plan de ordenación urbana actual de Carboneras, y ha solicitado al Ayuntamiento una certificación que demuestre dicho contenido en relación al terreno donde se encuentra el hotel de Azata.
Por otro lado, los grupos ecologistas mantienen que el TSJA sí anuló en un auto del mes pasado el acuerdo del pleno municipal que pretendía cumplir la sentencia sin verdaderamente hacerlo, considerando esta acción como una maniobra evasiva para evitar la modificación del PGOU.
Argumentan que, debido a la actitud renuente del Ayuntamiento de Carboneras, la imposición de una multa al alcalde por la cantidad específica de 700 euros cada 20 días u otra medida coercitiva es necesaria para garantizar el cumplimiento de la sentencia que protege El Algarrobico de cualquier desarrollo urbanístico.
El TSJA se negó a sancionar al alcalde de Carboneras en una resolución de abril, argumentando que la nulidad se aplicaba solamente a la parte resolutiva del acuerdo de pleno y no a la acción formal del Ayuntamiento en respuesta a la sentencia.
El colectivo conservacionista Greenpeace ha solicitado la suspensión de la ejecución de otra sentencia que requiere al Ayuntamiento revisar la licencia municipal de obras, lo cual facilitaría la demolición del hotel en cuestión.
Greenpeace busca evitar que el Ayuntamiento de Carboneras, aprovechando la reclasificación del terreno como urbanizable, evite anular la licencia de obras y sugiere que la única solución efectiva hasta ahora ha sido la imposición de medidas coercitivas contra el alcalde.
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