Una impresionante operación conjunta entre la Guardia Civil y la Agencia Tributaria ha logrado desarticular en Almería lo que se considera como la mayor plataforma logística de abastecimiento de combustible para narcolanchas en el Mediterráneo. Esto ha resultado en la detención de 50 miembros del conocido 'clan de los lateros', quienes contaban con un gran arsenal que incluía 25 embarcaciones, seis motos de agua, diez remolques, siete motores de alta cilindrada, un camión cisterna y más de 40.000 litros de combustible.
Según el comunicado conjunto de las autoridades, esta organización criminal había construido ilegalmente embarcaderos en el puerto de Adra para abastecer a las narcolanchas. Lo más sorprendente es que eran dirigidos por un preso desde la cárcel, quien utilizaba un teléfono móvil escondido en su celda y se comunicaba a través de aplicaciones encriptadas.
En el transcurso de la operación 'Ovidio', se incautaron más de 700.000 euros en efectivo, 33 vehículos, cinco armas de fuego, así como numerosos activos inmobiliarios y vehículos de lujo. Además, se bloquearon cuentas bancarias con un valor superior a los cinco millones de euros.
Esta investigación se inició a principios de 2023, cuando se descubrió la existencia de una red criminal en Adra dedicada al abastecimiento de combustible a embarcaciones utilizadas para narcotráfico e inmigración irregular. La organización utilizaba embarcaciones recreativas con amarres en los puertos deportivos de Adra y Almerimar.
Según las pesquisas, el trasbordo del combustible a las narcolanchas se hacía en dos etapas. En una primera fase, se adquiría el combustible en gasolineras y se transportaba en vehículos no autorizados, lo que generaba un riesgo debido a la falta de medidas de seguridad. En una segunda etapa, el combustible trasvasado a garrafas se llevaba a fincas en Adra, desde donde se distribuía a las embarcaciones ilegales.
La organización se caracterizaba por su violencia, empleando tácticas intimidatorias contra competidores, propietarios de embarcaciones incautadas y la población civil. Los beneficios obtenidos se destinaban a la compra de propiedades, vehículos de lujo y caballos de raza.
La operación culminó con la detención de 50 personas por diversos delitos, como organización criminal, tráfico de drogas, contrabando y blanqueo de capitales. Tanto la Guardia Civil como la Agencia Tributaria resaltan los peligros asociados al abastecimiento de combustible a narcolanchas, que han causado incidentes graves en el pasado.
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