Un hombre ha sido detenido en una calle céntrica de Sevilla por violar una orden de alejamiento de su pareja. En un intento desesperado por evitar su arresto, el individuo optó por utilizar a su bebé como escudo. Como consecuencia de sus acciones, el tribunal ha ordenado su encarcelamiento de inmediato. Así lo ha narrado la Policía Nacional en un comunicado de prensa.
La intervención policial comenzó cuando se recibió información de que el hombre había violado la orden de alejamiento de su pareja y se encontraba en la residencia familiar. A pesar de conocer esta restricción, el individuo decidió permanecer en el hogar. En respuesta, los agentes acudieron al lugar para proceder a su detención.
Al percatarse de la presencia policial, el hombre se refugió dentro de la vivienda y comenzó a arrojar objetos y abrir la llave del agua, empapando a los agentes. Como último recurso, tomó al bebé con un solo brazo, colgándolo de manera precaria y exponiéndolo a golpes accidentales debido a su propio comportamiento errático.
Con el objetivo de garantizar la seguridad del niño, los agentes ingresaron a la vivienda y localizaron al padre encerrado con su hijo. Previo a esto, tuvieron que tranquilizar a la madre, quien se encontraba ansiosa. Posteriormente, intentaron razonar con el hombre, quien, en su estado de ira, destrozó parte del mobiliario de la casa e incluso rompió una puerta mientras aún sostenía al bebé.
Después de más de 30 minutos de negociación, los agentes lograron que el hombre saliera de la habitación, entregara al bebé a la madre y se rindiera pacíficamente. Finalmente, se solicitó la asistencia de los servicios médicos para que evaluaran la salud del bebé y lo trasladaran al Hospital Virgen de Macarena para su examen y observación por posibles lesiones.
Este incidente pone de manifiesto el peligro de las personas que incumplen órdenes judiciales y el potencial riesgo al que exponen a los más vulnerables, como en este caso, un bebé inocente. La rápida y valiente intervención de la Policía Nacional permitió salvaguardar la seguridad del niño y detener al infractor de la medida de alejamiento.