SEVILLA, 17 Ene.
Agentes de la Policía Nacional, en una operación conjunta con la Guardia Civil y la Ofast francesa y ordenada por Eurojust, han desarticulado una organización criminal dedicada al envío de cocaína a Europa a través de veleros. Enmarcada en el Plan Meridional, ha finalizado con 15 detenidos y con la incautación de sobra de 1.000 kilogramos de cocaína, 797.950 euros en efectivo, 2 veleros, siete automóviles y tres armas, entre otros muchos efectos.
En un aviso grupo se especificó que el estupefaciente era distribuido por las provincias españolas de Cádiz y Málaga, tal como por la zona de Ile de France --que abarca París y su área metropolitana--.
El entramado, asentado en Marbella y París, en teoría preparaba envíos de cocaína desde el Caribe hasta Europa en veleros capitaneados por entre los integrantes de la organización y presentaba 2 ramificaciones: la rama francesa, que se encargaba de la distribución de la sustancia; y la de españa, encargada de los contactos con las organizaciones suministradoras del estupefaciente, establecidas en Colombia y Venezuela.
La investigación se inició en el verano de 2021 en el momento en que la Guardia Civil tuvo conocimiento de la llegada de un velero a El Puerto de Santa María (Cádiz) capitaneado por un ciudadano francés que podría estar relacionado con el tráfico de cocaína.
Las gestiones policiales practicadas, según ha añadido el comunicado, patentizaron los vínculos que ya están entre este sujeto y un segundo ciudadano francés que era investigado por la Policía Nacional por su presunta relación con el tráfico en todo el mundo de estupefacientes.
Por esta razón, los agentes pidieron información a las autoridades policiales francesas mediante la Oficina Antiestupefacientes (Ofast) para entender el perfil de los investigados.
El primero de ellos, conforme han detallado, es popular en Francia por su vinculación con el tráfico de drogas por mar y había sido salvado en el año 2010 en el Canal de la Mancha tras hundirse un velero que capitaneaba a solas y sobre el que existían rastros de que transportaba cocaína.
Al otro sujeto no le constaban antecedentes policiales, más allá de que uno de sus hermanos está íntimamente relacionado con el tráfico de cocaína en París, siendo nuestra organización la responsable de ingresar la sustancia en Francia en enormes proporciones.
Con el progreso de las pesquisas, los agentes observaron varios encuentros entre los dos individuos tanto en España como en Francia y, por esta razón, se coordinaron las indagaciones por medio de Europol --y más tarde por medio de Eurojust-- y se formalizó un Equipo Conjunto de Investigación (ECI) entre los dos países para trabajar de manera conjunta a nivel policial y judicial.
Los agentes advirtieron un incremento en el número de asambleas entre los investigados y múltiples ciudadanos franceses asentados en la localidad malagueña de Marbella, varios de los cuales eran "históricos integrantes de la mafia marsellesa", han añadido desde la investigación.
Entre los contactos vistos hallaron a "un popular criminal francés relacionado a lo largo de décadas al delito ordenado y al hurto de bancos", que además de esto había sido culpado en Francia por matar a un policía en el transcurso de un hurto.
En otoño de 2022 los estudiosos observaron que la organización aceleraba los preparativos de lo que parecía una operación en marcha y advirtieron un aumento de los viajes del primordial investigado en este país para reunirse con sus asociados de venezuela en diversos puntos de España. Asimismo, viajaba de forma continua a París, donde, al lado de su hermano, visitaba un piso supuestamente vacío de en el que los dos metían y sacaban distintas cajas y bultos.
Al tiempo, el primero de los investigados nombrados, que se encontraba asentado en París, adquirió, reparó y acondicionó un velero en Martinica para su navegación transoceánica. Fue en el mes de noviembre en el momento en que este último sujeto se desplazó a Martinica y, tras mantenerse unos días y avituallarse, inició la navegación a solas dentro del velero.
Si bien había proclamado como destino final Francia, el velero no tomó con rumbo a Europa sino navegó dirección sur y continuó unas horas al norte de la región de Isla Margarita, pero después alteró su rumbo y también inició la travesía hacia Europa por la ruta de las Turbes.
A pesar de las malas condiciones del mar, a fines del ya transcurrido mes de diciembre se activó a la Armada Española a fin de que transportara a un aparato del GEO, al lado de estudiosos de los dos cuerpos policiales y de la Ofast, quienes interceptaron y abordaron el velero al oeste de las Islas Turbes. En su interior encontraron 25 fardos de cocaína que lanzaron un peso total de 740 kilogramos de estupefaciente.
Asimismo, detuvieron a 2 personas, tanto al primero de los investigados como a otro hombre venezolano que cumplía las funcionalidades de "notario" y que había embarcado en el velero al lado de la cocaína en Isla Margarita.
Tras la incautación de la cocaína en mar adentro, los agentes explotaron la operación en tierra con detenciones y registros completados coordinadamente entre España y Francia.
En España se requisaron de 52.450 euros en metálico, 2 armas localizadas en un residencia de Salamanca, 2 enrutadores satelitales para embarcaciones, automóviles y múltiples móviles, ciertos de ellos con sistemas de comunicación encriptados.
Por otro lado, el piso de Francia donde habían sido vistos los hermanos, situado en el centro de París, resultó ser una guardería de estupefaciente donde se encontraron otros 345 kilogramos de cocaína y un arma. Además, en otros registros intervinieron 745.500 euros.
La operación, que ha finalizado con la detención de 15 personas --entre aquéllas que están los líderes de la organización, los encargados del transporte, los distribuidores del estupefaciente en Francia, financiadores, ayudantes mucho más próximos y representantes de la organización suministradora en España-- permitió la completa desarticulación de la organización criminal.