ALMERÍA, 26 de agosto. En un incidente violento ocurrido durante la noche, un agente de la Guardia Civil sufrió una grave lesión en un dedo tras ser mordido mientras intentaba detener a un individuo en una vivienda en Garrucha, Almería.

Fuentes del servicio de emergencias de Andalucía han revelado que se recibió una llamada alrededor de la medianoche solicitando ayuda para controlar a un hombre que mostraba un comportamiento agresivo. Ante la situación, se movilizaron equipos de Policía Local, Protección Civil y Guardia Civil para atender la emergencia.

Al llegar al lugar, los agentes encontraron al hombre en la planta superior de la vivienda, en un estado de evidente alteración y resistencia a recibir asistencia médica. A pesar de los esfuerzos de los equipos durante aproximadamente una hora, el hombre rechazó ser atendido, lo que llevó a los agentes a tomar la decisión de reducirlo para poder administrarle la atención necesaria.

En medio del intento de inmovilización, el sospechoso reaccionó violentamente y mordió con fuerza el dedo índice de uno de los agentes, resultando en la pérdida de la última falange. Además, el individuo agredió al agente con otro mordisco en el brazo y lanzó amenazas de muerte, alcanzando incluso a otro oficial con un rodillazo.

Dadas las circunstancias, se intensificaron los esfuerzos para controlar al agresor, y finalmente un sanitario logró administrarle un sedante a pesar de recibir también golpes durante el proceso. Ambos, el hombre en cuestión y el agente herido, fueron trasladados al Hospital de La Inmaculada en Huércal-Overa. Otro agente que sufrió lesiones fue atendido en un centro de salud local en Garrucha.

El hombre agresor fue detenido y se encuentra bajo custodia policial enfrentando cargos por atentado y lesiones, mientras las investigaciones continúan y el caso se preparará para ser presentado ante el juez correspondiente.