Cárcel de seis años para el capitán de una patera con 40 inmigrantes a bordo, incluidos niños, en Almería.

ALMERÍA, 23 de agosto. La Audiencia Provincial de Almería ha dictado una sentencia condenatoria de seis años de prisión para un hombre que patroneaba un barco pesquero transformado en patera, en el que viajaban 40 argelinos, entre ellos cuatro menores de edad y un adulto diabético que requirió atención médica urgente tras desmayarse durante la travesía.
El veredicto, al que se puede presentar un recurso de apelación, señala que el viaje presentaba un "claro y evidente peligro" para la seguridad de los ocupantes, quienes viajaban sin chalecos salvavidas y excedían el número permitido a bordo, lo cual generó un riesgo considerable para sus vidas y bienestar.
A pesar de que el imputado alegó no formar parte de ninguna organización criminal y se definió en el juicio como "inmigrante como los demás", el tribunal resalta su papel fundamental al manejar la embarcación y poner en riesgo a los pasajeros. La sentencia menciona que no se lo puede considerar un simple viajero, dado que tenía el control total sobre la embarcación y podía decidir su rumbo.
El tribunal también ratificó la identificación del acusado realizada por la Guardia Civil, enfatizando que su responsabilidad en el caso es indiscutible. En la resolución, se establece que el hombre actuó con la intención de obtener beneficios económicos de manera ilegal, al aceptar asumir el mando de la nave, a pesar de ser consciente de que estaba facilitando la inmigración irregular hacia España.
El incidente tuvo lugar el 15 de abril de 2024, cuando la embarcación, un pesquero de fibra de aproximadamente ocho metros, fue interceptada a unas 11,5 millas de la costa de Almería. A bordo de la nave había 41 personas, incluyendo niños y el propio piloto.
La sentencia también indica que la embarcación no cumplía con las condiciones de seguridad necesarias, ya que estaba destinada a la pesca local y, por lo tanto, no podía navegar más allá de las diez millas de la costa según la legislación española. Los ocupantes carecían de chalecos salvavidas e incluso de alimentos para el viaje, que se vio complicado por condiciones de viento variables y la presencia de 81 buques en la zona donde se encontraba la nave.
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