MADRID, 24 de enero.

En una decisión que ha generado controversia, el juzgado número 1 de Algeciras ha decidido poner en libertad a tres personas que fueron detenidas el pasado jueves en el puerto de esta localidad gaditana. Los sospechosos intentaban abordar un ferry con destino a la ciudad marroquí de Tánger, transportando diversos objetos que habían sido robados, entre ellos un ordenador que pertenecía a una de las abogadas de Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid.

El juez encargado del caso ha impuesto medidas restrictivas a los detenidos, que deberán firmar en un juzgado cada quince días y tienen prohibido salir del país. Esta información fue confirmada por fuentes vinculadas a la investigación a Europa Press.

Los tres arrestados en el momento de su intento de embarque son dos mujeres de nacionalidad marroquí, de 20 y 66 años, junto a un hombre de 42 años originario de Ceuta. Todos ellos residen en la localidad de Alicante, que es también donde se presentó la denuncia por el robo, ocurrido el pasado 12 de enero en la vivienda de la abogada Alberto González Amador, pareja de Díaz Ayuso.

La investigación liderada por la Policía Judicial de la Guardia Civil en Alicante sugiere que el robo se inscribe dentro de la delincuencia común. Es relevante señalar que los tres detenidos ya poseen antecedentes por delitos menores relacionados con el contrabando de tabaco, lo que añade un matiz más a su ya cuestionable historial.

Las pesquisas han confirmado que estos tres individuos, capturados la noche del miércoles, llegaron al puerto de Algeciras en una furgoneta, en la que transportaban los diversos objetos robados, incluido el destacado ordenador de marca Apple perteneciente a la abogada vinculada a la presidenta madrileña. Se sospecha que su intención era vender este material en Marruecos, lo que agrava aún más la seriedad del asunto.

La abogada del novio de Ayuso había presentado una denuncia ampliada el 12 de enero a raíz del robo en su residencia de Guardamar del Segura, en Alicante. Su esposo había interpuesto una denuncia inicial dos días antes, en la que mencionaba la sustracción de varios dispositivos electrónicos, incluidos dos portátiles, dos teléfonos y tres tabletas. Sin embargo, la abogada clarificó posteriormente que el único objeto que realmente faltaba era el ordenador que ahora ha sido recuperado por las autoridades.

En un contexto similar, a mediados de diciembre otro abogado de la pareja de Ayuso había denunciado otro robo en una vivienda en Turleque, Toledo. En este caso, aunque no se reportaron dispositivos electrónicos desaparecidos, sí se notificó el robo de bisutería, según las fuentes consultadas durante la investigación.

Tras estos acontecimientos, la abogada solicitó a la Guardia Civil que ampliara la denuncia inicial para investigar si había alguna conexión entre estos dos robos, considerando que ambos abogados representan legalmente a la pareja frente a las investigaciones por presuntos delitos fiscales que podrían comprometer a González Amador. Además, son parte del complejo entramado legal que rodea otros casos, como la supuesta revelación de secretos que involucra al fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz.