El alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, ha sido objeto de críticas por su reciente viaje a Madrid, donde registró una carta en catalán para solicitar inversiones en infraestructuras para la ciudad. Este acto ha sido calificado como una “gansada” por el ministro de Transportes, el socialista Óscar Puente, quien considera que el viaje fue innecesario.

Puente, a través de su cuenta en la red social X, comentó sobre la polémica generada en torno a la carta presentada por Sanz. En su mensaje, el ministro hizo referencia a un artículo que lo acusaba de “hacer el ganso” y sugirió que los sevillanos habían financiado esta “gansada”. Sanz, por su parte, había entregado dos cartas en el Ministerio de Transportes: una en español y otra en catalán, enfatizando la preocupación por el estado de las infraestructuras ferroviarias de la capital andaluza.

El alcalde ha denunciado que Sevilla continúa esperando mejoras en proyectos vitales, como la conexión de la estación de tren con el aeropuerto y el cierre del anillo ferroviario, mientras Barcelona ha recibido considerable inversión estatal. Con más de un año solicitando una reunión con Puente para discutir estos temas críticos, Sanz manifestó su frustración ante la falta de respuesta por parte del ministro.

Las tensiones entre ambos políticos no son nuevas. En intercambios previos en la misma red social, Puente había calificado a Sanz de “mentiroso e impresentable”, aludiendo a un desacuerdo sobre la financiación del metro de Sevilla y sus supuestos efectos en las inversiones en Cataluña. A esto, el alcalde replicó que toleraría tales acusaciones si se traducían en inversiones para su ciudad.

Puente, por su parte, argumenta que la falta de diálogo es culpa de Sanz, al afirmarse que el alcalde no está dispuesto a abordar la política como un servicio público, sino que busca confrontación a través de descalificaciones. A medida que el alcalde sigue demandando una reunión con el ministro, hay quienes interpretan que el Gobierno está ignorando las necesidades de Sevilla y tratando a la ciudad con indiferencia.