Crónica Andalucía.

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Montero defiende incondicionalmente a su jefe de gabinete ante acusaciones del PP sobre vínculos con una "trama".

Montero defiende incondicionalmente a su jefe de gabinete ante acusaciones del PP sobre vínculos con una

En un nuevo capítulo de la confrontación política, la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, reafirmó su apoyo incondicional a su jefe de gabinete, Carlos Moreno, tras las recientes acusaciones del Partido Popular (PP) sobre posibles irregularidades. Dichas acusaciones surgieron después de que un juez revelara que Moreno estaba supuestamente involucrado en una trama que le daba "instrucciones".

Durante una tensa sesión de control en el Congreso, el vicesecretario de Coordinación Autonómica y Local del PP, Elías Bendodo, cuestionó a Montero si seguía confiando en Moreno, refiriéndose a un reportaje de 'El Confidencial'. En este artículo, se mencionaba que Hacienda había retrasado el pago de una deuda de una empresa vinculada al comisionista Víctor de Aldama tras una reunión con el jefe de gabinete. Montero, sin titubear, respondió: "Rotundamente sí" y reprochó al PP que su oposición estaba basada en mentiras y ataques verborrea, sin ofrecer soluciones constructivas al país.

La ministra no se detuvo ahí; también denunció al PP por socavar las instituciones y no honrar el resultado democrático, alegando que desde el inicio del mandato del Gobierno de Pedro Sánchez, han estado en una campaña de "acoso y derribo" contra ellos. Montero criticó la estrategia de oposición del PP, sugiriendo que debería reflexionar sobre su enfoque, el cual, a su juicio, carece de propuestas viables para el bienestar del país.

Montero, en una arremetida directa, centró su crítica en el caso de la pareja de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, quien enfrenta problemas legales. Cuestionó al vicesecretario de Hacienda del PP, Juan Bravo, por su silencio ante lo que considera ser acciones delictivas por parte del novio de Ayuso, retándolo a expresar su opinión sobre la situación.

En contraposición, Bravo evitó abordar el escándalo relacionado con Ayuso, enfocando su crítica en la economía nacional. Desafió la afirmación del Gobierno de que la economía "va a toda velocidad", señalando que desde la perspectiva de los españoles, las cosas no se ven normales. Al final de su intervención, hizo una semblanza esperanzadora para los ciudadanos, afirmando que cada día que pasa representa un día menos de penurias y un paso más hacia la recuperación de la normalidad en España.