Crónica Andalucía.

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Montero demanda a la Junta respuestas concretas para la crisis del cribado, dejando atrás gestos simbólicos.

Montero demanda a la Junta respuestas concretas para la crisis del cribado, dejando atrás gestos simbólicos.

Este viernes, María Jesús Montero, actual vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, expresó su preocupación ante el Gobierno de Andalucía, instando a la necesidad de implementar “soluciones efectivas” para la crisis generada por el cribado de cáncer de mama, específicamente en lo que respecta a los resultados de mamografías que no han sido concluyentes. Este llamado lo hizo en un contexto donde se percibe un intento por parte de las autoridades de minimizar el problema, simplemente llenando de elogios a las asociaciones de mujeres afectadas, mientras se trata de ocultar una gestión deficientemente percibida.

Durante una rueda de prensa celebrada en Algeciras, en el marco de un acuerdo con diversos municipios de la Mancomunidad del Campo de Gibraltar, Montero criticó a la Junta de Andalucía, afirmando que “no están escuchando a las víctimas”. Según su opinión, el Gobierno regional ha optado por perpetuar una narrativa que victimiza a quienes intentan visibilizar su sufrimiento, al mismo tiempo que los acusa de politizar su situación.

Montero también recordó un reciente encuentro entre el consejero de Sanidad, Antonio Sanz, y Ángela Claverol, presidenta de la Asociación de Mujeres con Cáncer de Mama (Amama) en Sevilla. Según Claverol, Sanz intentó justificar la situación atribuyendo la responsabilidad a los profesionales de la salud, lo que evidenciaría la falta de liderazgo y la confusión dentro del sistema sanitario andaluz.

“La Administración de Moreno Bonilla avanza sin rumbo claro, sin entender cómo debe actuar ante la crisis del sistema de salud”, declaró la vicepresidenta, quien no dudó en resaltar su formación como médica para recalcar la imperiosa necesidad de contar con diagnósticos certeros para poder otorgar tratamientos adecuados.

A la luz de los problemas planteados no solo por el programa de mamografías, el Gobierno andaluz anunció un refuerzo en otros programas de cribado, como el de cáncer colorrectal y de cuello uterino. Montero advirtió que “quien no apueste por estas políticas públicas perjudica su validez”, apuntando que esta tendencia es solo un paso hacia la privatización del servicio sanitario.

Además, criticó la presentación del presupuesto andaluz para el año 2026, calificándolo como un aparato “preelectoral” diseñado para dar una impresión de estabilidad. Según Montero, esta estrategia de la Junta de Andalucía resulta “vacía”, puesto que en momentos críticos se necesita una clase política capacitada y preparada para enfrentar y resolver problemas, algo que, a su juicio, está fallando bajo el liderazgo de Moreno Bonilla.

Montero también mencionó un incremento en los recursos transferidos a Andalucía por parte del Gobierno central, documentando que se han otorgado cerca de un 50% más de dinero que durante la administración de Mariano Rajoy, lo que se traduce en una inyección de aproximadamente 8.000 millones de euros anuales. Con este contexto financiero, se torna “incomprensible” la situación actual de la sanidad pública en la región.

En un tono de frustración, se cuestionó la falta de comunicación hacia las mujeres afectadas que requerían más exámenes para descartar un diagnóstico de cáncer de mama, enfatizando que un cribado eficaz permite detectar la enfermedad a tiempo. “El cancer de mama, cuando se diagnosticado a tiempo, tiene altas probabilidades de curación”, expresó Montero, quien también destacó que el Gobierno había admitido haber fallado en la comunicación con más de 2.300 mujeres afectadas, aunque las asociaciones afirman que la cifra real podría ser mucho mayor.

La secretaria general del PSOE en Andalucía también mostró escepticismo ante el reciente anuncio de la contratación de 5.000 nuevos profesionales sanitarios, especialmente cuando datos periodísticos indican una reducción en el personal de algunos hospitales, como el Virgen del Rocío en Sevilla. “Están tratando de proyectar una imagen de normalidad que no se corresponde con la realidad”, argumentó, acusando al Gobierno de mentir sobre la verdadera situación del sistema de salud.

Montero, profundamente conocedora del sistema sanitario, insistió en que son necesarias reformas urgentes y adecuadas, advirtiendo que el Gobierno andaluz no puede seguir tratando esta crisis como un asunto temporal que pueda resolverse con ajustes insignificantes en el manejo de los medios de comunicación, en referencia a la elección de Antonio Sanz como consejero de Sanidad tras la dimisión de su predecesora.

Finalmente, la ministra reafirmó su compromiso al afirmar: “No cejaremos hasta que no tengamos la certeza de que el sistema sanitario responde adecuadamente a las necesidades de la población”, resaltando la gravedad de la crisis relacionada con el cribado de cáncer de mama.