El pasado 19 de noviembre, el Gobierno de Andalucía anunció oficialmente el cierre de la fase de "recuperación" correspondiente al Plan de Emergencias por Riego de Inundaciones, iniciando este proceso tras un agotador período de 15 días en el que las Dos Amas de Nieve (DANA) han dejado su huella en 445 municipios de la comunidad.

Antonio Sanz, consejero de la Presidencia, Interior, Diálogo Social y Simplificación Administrativa, comunicó esta decisión en una conferencia de prensa posterior a la reunión del Consejo de Gobierno. Destacó que con la finalización de la limpieza y la restauración de las áreas afectadas, se da por concluido este plan de emergencia, marcando una etapa crucial en la gestión de crisis frente a desastres naturales.

Durante la sesión del Consejo, se presentó un detallado informe sobre el impacto de las dos DANA en Andalucía, que han afectado a un total de 445 municipios y entidades locales autónomas. Con el fin de mitigar los efectos de estas catástrofes, el 5 de noviembre se aprobó una declaración de situación excepcional. Esta medida se enmarca dentro del Decreto 277/2023, emitido el 5 de diciembre, que regula las ayudas destinadas a las entidades locales que han sufrido los embates de fenómenos naturales adversos en Andalucía.

De hecho, ante la gravedad de la situación, la Junta de Andalucía ha movilizado más de 80 millones de euros en respuesta a los estragos ocasionados por la primera DANA. Esta ayuda se ha distribuido entre los 284 ayuntamientos afectados, incluyendo inversiones en la reparación de infraestructuras vitales como carreteras, sistemas de agua y centros educativos.

En el desglose de estas ayudas, se anunció una asignación inicial de 12 millones de euros que beneficiará a 249 municipios. Sin embargo, se prevé que esta cifra se amplíe para incluir a 35 municipios y entidades locales autónomas adicionales, especialmente en la provincia de Cádiz, lo que demuestra el compromiso del Gobierno andaluz de actuar con eficacia y responder a las demandas de los ayuntamientos afectados, quien también podrán solicitar ayuda en el marco del segundo temporal.

A lo largo de los recientes episodios de lluvias intensas, el Servicio 112 gestionó más de 3.200 emergencias y realizó el desalojo de cerca de 5.000 personas, evidenciando la magnitud de la crisis. Este operativo incluyó rescates masivos y la evacuación de ciudadanos a albergues debido a la gravedad de las circunstancias. Sin lugar a dudas, la rabia del agua ha sido tal que ha dejado un impacto notable en viviendas, negocios y en los medios de transporte, incluidos el Metro de Málaga y la red de autobuses urbanos y metropolitanos.

Desafortunadamente, este complejo panorama también ha tenido un costo humano, habiéndose reportado varios heridos e incluso un fallecido, un hombre de 71 años que falleció en el Hospital Clínico tras ser rescatado de una finca en Alhaurín de la Torre, que sufrió múltiples paradas cardiorrespiratorias.

La devastación ha sido especialmente severa en la provincia de Málaga, el epicentro de las emergencias con un total de 1.542 incidentes reportados, seguida por Cádiz (571), Granada (372), Sevilla (249), Almería (217), Huelva con 154 incidentes, Jaén (62) y Córdoba (47).

El consejero también subrayó la relevancia de implementar nuevas tecnologías en la gestión de emergencias, destacando el uso de sistemas como 'ES Alert' y '112 inverso', que se activaron en múltiples ocasiones durante las DANA y se han convertido en herramientas fundamentales para informar a la población en situaciones críticas.

Cabe mencionar que una prueba previa del sistema se realizó en octubre de 2022, lo que demuestra el compromiso del Gobierno por mejorar y adaptar las tecnologías a las necesidades actuales. Asimismo, se evidenció la intención de consolidar los servicios de emergencia, incluyendo la creación de la Agencia de Seguridad y Emergencias de Andalucía (ASEMA), cuyo presupuesto para el año 2025 contempla una cifra significativa de 270 millones de euros para su establecimiento, asegurando así una mayor preparación ante futuros desastres.

El plan integral conocido como Pigea, que cuenta con una inversión de 17 millones de euros, también fue destacado, puesto que busca modernizar la gestión de emergencias a través del uso de inteligencia artificial y la digitalización de sistemas de alerta, señalando un avance significativo en la forma en que Andalucía enfrentará futuras crisis.

El 12 de noviembre se constituyó un Gabinete Permanente para realizar un seguimiento exhaustivo de las precipitaciones registradas, conforme al Decreto 477/2015, que establece los órganos necesarios para la participación administrativa. Este organo culminó su seguimiento el 15 de noviembre, permitiendo una gestión más ágil y eficaz ante la situación de emergencia.

Gracias a su labor, el Gabinete pudo anticiparse a los riesgos, informando sobre el desbordamiento de ríos y otras amenazas a la seguridad de los municipios, lo que permitió facilitar una respuesta organizada y férrea durante la crisis.

Sanz también destacó que ha mantenido una comunicación constante con el delegado del Gobierno central en Andalucía, Pedro Fernández, durante todo este proceso. Este enfoque de coordinación y colaboración es fundamental, según Sanz, para manejar adecuadamente las emergencias y potenciar la cohesión entre las diferentes administraciones.