El responsable del sector apícola de COAG Andalucía, Antonio Vázquez, ha urgido a la Junta de Andalucía a atender de manera inmediata la petición de reunión de esta organización agraria para abordar el problema derivado de la expansión de una especie invasora de avispón, conocida como 'Vespa orientalis'. Esta especie está causando graves problemas a la apicultura en Andalucía, ya que ataca las colmenas en busca de alimento, se lleva las reservas de miel y polen y acaba con la cría de abejas.
COAG Andalucía ha enviado una solicitud de reunión a la Dirección General de Política Forestal y Sostenibilidad de la Consejería de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul, en la cual explican que desde la aparición de la especie en Andalucía en 2019, han estado monitoreando su expansión y llevando a cabo las gestiones necesarias para que sea declarada especie exótica invasora por el Gobierno estatal.
En el pasado, mantuvieron varias reuniones con la Dirección General de Política Forestal y Biodiversidad para solicitar la implementación de un programa de control de esta avispa. Además, el año pasado se confirmó la presencia de un nido de otra especie invasora, la 'Vespa velutina', en la provincia de Cádiz.
Dada la empeoramiento de la situación y la expansión del avispón en Andalucía, COAG Andalucía insiste en la necesidad de que la 'Vespa orientalis' sea declarada especie exótica invasora y exige a la Junta que implemente un plan de control en el que los ayuntamientos también estén involucrados.
Por tanto, han solicitado una reunión lo antes posible para analizar el 'Programa de gestión de avispones exóticos (Género Vespa) en la Comunidad Autónoma de Andalucía', elaborado por la Consejería de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul, y discutir su implementación en el sector apícola andaluz.
Desde que se avistó por primera vez en la provincia de Cádiz, se ha observado un aumento de la presencia del avispón en el sur peninsular. Específicamente, su expansión se está produciendo rápidamente en la provincia de Málaga, y ya se han encontrado ejemplares en Sevilla, Huelva, Córdoba y Jaén.
La ubicación de los nidos de esta especie invasora, cerca de áreas urbanas y a ras de suelo, la convierte en un problema para la sociedad en su conjunto. Al tocar los nidos, se corre el riesgo de sufrir múltiples ataques, con resultados potencialmente fatales. Las picaduras de este avispón son extremadamente dolorosas y pueden desencadenar reacciones alérgicas.
Además de atacar a las colmenas de abejas y llevar a la disminución de la producción de miel, la 'Vespa orientalis' también afecta al avispón autóctono al competir por presas y otros elementos de su alimentación. Esta especie invasora también puede provocar grandes pérdidas en el sector agrícola, al atacar los frutos y dejarlos sin valor comercial.