El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía ha iniciado una investigación especial sobre el supuesto secuestro de la concejal socialista de Maracena, Vanessa Romero, después de que el Juzgado de Instrucción número 5 de Granada presentara la exposición razonada y identificara que el diputado regional Noel López podría estar involucrado en el caso.

La Fiscalía Superior de Andalucía ha recibido las diligencias y la exposición razonada el 31 de mayo, luego de haber sido emitidas el pasado 26 de mayo. La Sala de lo Penal ha designado a un magistrado para la causa especial en cuestión y ha ordenado que se envíe un oficio al Parlamento de Andalucía para verificar la condición de aforado de López.

Los cargos políticos del Ayuntamiento de Maracena, la alcaldesa Berta Linares y el concejal de Urbanismo, también se enfrentan a la exposición razonada. Se ha remitido esta causa al Tribunal Superior de Justicia de Andalucía debido a la posible implicación de Noel López en el suceso. El presunto secuestrador permanece en prisión provisional y era la pareja sentimental de la alcaldesa en el momento de los hechos.

Noel López se ha descartado de dejar su cargo como parlamentario andaluz y como secretario segundo de la Mesa de la Cámara tras haber renunciado temporalmente a su responsabilidad como "número tres" de la dirección de la federación socialista andaluza.

La alcaldesa en funciones de Maracena, Berta Linares, ha declarado que no ve motivos para renunciar o dejar de optar a su investidura como número uno de la candidatura más votada en la localidad, por lo que ha pedido que se hable cuanto antes. Ella cree que renunciar sería reconocerse culpable, lo cual no es el caso.

El secuestro ocurrió el 21 de febrero de este año, a plena luz del día, después de que Vanessa Romero dejara a sus hijos en la escuela y encontrara al secuestrador. La amenazó con una pistola falsa y la ató con bridas y la metió en el maletero del coche. Sin embargo, ella logró escapar y pedir ayuda tras lo que denunció el suceso ante la Guardia Civil. El secuestrador declaró que el secuestro no estaba planeado y que su intención no era acabar con la vida de la concejal.

Tras una investigación exhaustiva de los terminales telefónicos de los involucrados, se concluyó que a las 11:30 de la mañana tanto el concejal de Urbanismo como Berta Linares ya sabían del secuestro, y poco más tarde, hicieron varias llamadas a Noel López, quien luego habló con un abogado. También se descubrió que Berta Linares y el secuestrador se encontraron en un salón de juegos en Maracena y que la alcaldesa circuló en el coche del concejal de Urbanismo poco después.