
La Ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero, ha expresado su preocupación por la situación actual de la sanidad andaluza. El miércoles, se llevó a cabo una huelga en atención primaria, y Montero hizo un llamado al Gobierno andaluz para que no venda la sanidad pública y escuche a los profesionales, ya que son ellos los que tienen las respuestas para mejorarla.
Antes de asistir a los actos conmemorativos por el Día Internacional del Pueblo Gitano, Montero habló con los medios y destacó que la sanidad ha sido un motivo de orgullo para los andaluces, pero que lamentablemente se está deteriorando por la política adoptada por el presidente de la Junta, Juanma Moreno.
La privatización de los servicios públicos, junto con una orden de tarifas incomprensible, ha agravado la crisis en curso, expuso la ministra. Si el presidente no retira esta orden, es porque tiene la intención de seguir con la privatización en el futuro, agregó Montero. A pesar de que Andalucía ha recibido 31.000 millones más desde que Pedro Sánchez llegó al poder, el presidente Moreno está evadiendo su responsabilidad y no emplea el dinero en políticas eficientes.
En respuesta a esta situación, Montero instó una vez más a no vender la sanidad, dejarla en paz y escuchar a los profesionales, ya que son ellos los que pueden mejorar la atención pública. Además, señaló que el Ejecutivo central no permitirá la decadencia de la atención primaria ni de la sanidad pública.
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