Nueva Ley de Universidades protegerá bonificación de matrículas y obligará a privadas a destinar 3% del presupuesto a becas.

El consejero de Universidad, Investigación e Innovación de la Junta de Andalucía, José Carlos Gómez Villamandos, presentó el anteproyecto de la Ley de Universidades para Andalucía (LUPA), el cual fue aprobado este martes por el Consejo de Gobierno. Esta ley incluye la garantía de un sistema de bonificación de matrícula para los estudiantes, que asegura la igualdad de oportunidades en el acceso a la educación superior.

Entre las disposiciones de la nueva ley se encuentra la obligación para las universidades privadas de destinar un porcentaje de sus ingresos a becas y ayudas al estudio, además de financiar planes de investigación. Se impondrán más requisitos para la apertura de instituciones académicas privadas en Andalucía, como la experiencia previa en educación superior pública de los promotores y gestores.

En términos de proyección internacional, la ley establece la obligación de obtener un nivel B2 en un idioma extranjero para obtener el título universitario y para el acceso de profesores a determinadas categorías. Además, se garantizarán fondos para apoyar a estudiantes y profesores que necesiten ayuda en este aspecto.

Para fortalecer la estabilidad y garantía del sistema universitario, la ley contempla la posibilidad de que las universidades cuenten con un interventor en su Relación de Puestos de Trabajo (RPT). También se enfoca en retener talento, buscando estabilizar a los profesores universitarios a una edad más temprana que la actual.

Se introducen medidas para colaborar con otros agentes del conocimiento, fortaleciendo la competitividad de las universidades andaluzas. Además, se añaden figuras profesionales para garantizar un relevo generacional de calidad y se limitan los contratos de profesores sustitutos para eliminar la precarización laboral en el sector.

La ley establece un modelo de financiación común para las universidades públicas, basado en financiación básica armonizada, financiación según resultados, y financiación de nivelación. También se enfoca en impulsar la formación continua a través de títulos propios y microcredenciales, con el objetivo de mejorar las competencias de los estudiantes de acuerdo a las demandas del mercado laboral.

En resumen, la Ley de Universidades para Andalucía es parte de la mayor reforma del sistema universitario andaluz en décadas, la cual también incluye cambios estructurales significativos como el nuevo modelo de financiación, la ordenación de enseñanzas y mejoras salariales y laborales para diferentes roles en la universidad.