Crónica Andalucía.

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Regantes alertan sobre inusuales restricciones por sequía y reprochan la inacción de las autoridades.

Regantes alertan sobre inusuales restricciones por sequía y reprochan la inacción de las autoridades.

SEVILLA, 14 de enero.

La Asociación de Comunidades de Regantes de Andalucía, conocida como Feragua, ha hecho un urgente llamado a las instituciones pertinentes ante la crítica situación que atraviesan los embalses de la región. Este mensaje surge tras un periodo de noviembre y diciembre marcado por la escasez de lluvias, lo que podría tener serias implicaciones para las campañas de riego que se avecinan.

En el comunicado emitido, Feragua subraya que, a pesar de la percepción generalizada de que la sequía ha dado un respiro, la realidad es diametralmente opuesta. La reserva hídrica en Andalucía ha experimentado un aumento mínimo, del 33% al 33,5%, lo que representa un incremento de apenas medio punto porcentual. José Manuel Cepeda, presidente de Feragua, enfatiza que “las restricciones para el riego han alcanzado niveles críticos” y advierte sobre el riesgo que esto representa para la próxima campaña agrícola debido a la falta de acción por parte de las administraciones.

Aunque los sistemas de abastecimiento de agua para uso urbano se encuentran en una situación más estable, el panorama para el regadío es realmente desolador. “La situación para el riego es de extrema gravedad”, señala Cepeda, instando a que se tomen medidas con urgencia para evitar unas consecuencias aún más severas.

Un análisis de los diferentes sistemas hídricos revela que en el sistema Tinto-Odiel-Piedras, los embalses han incrementado su capacidad del 37,5% al 39,8%, pero las reservas han comenzado a decrecer nuevamente. En las Cuencas Mediterráneas Andaluzas, el incremento ha sido del 28,5% al 29%, mientras que en el Guadalete-Barbate apenas se ha logrado una mejora del 0,8%, pasando del 27,7% al 28,5%. El Guadalquivir se mantiene prácticamente estancado, alrededor del 35% de su capacidad.

Esta situación ha llevado a la implementación de restricciones significativas en las áreas de regadío. En el sistema Tinto-Odiel-Piedras, las limitaciones han llegado al 25%, mientras que en el Guadalete-Barbate alcanzan el 50%. En las Cuencas Mediterráneas, incluso se han visto restricciones del 100% en zonas como la Axarquía. En lo que respecta al Guadalquivir, se anticipan restricciones que oscilarán entre el 60% y el 75%, cifras que se concretarán en la próxima Comisión de Desembalse programada para febrero.

Feragua advierte que esta crisis hídrica no solo continúa, sino que podría intensificarse si no se implementan medidas inmediatas. La asociación critica la inacción de las administraciones, que según ellos, “no han promovido ni acelerado las obras de regulación ni los proyectos de balsas que resultan esenciales para mitigar la situación a medio y largo plazo”.

“Es imprescindible que tanto las autoridades como los medios de comunicación mantengan el enfoque en la sequía, puesto que la situación sigue siendo crítica”, afirma Feragua. El mapa hídrico de la región ilustra con claridad esta urgencia, mostrando que mientras los sistemas de abastecimiento se encuentran mayoritariamente en condiciones de normalidad o prealerta (indicados en verde y amarillo), los sistemas de regadío están en niveles de alerta y emergencia (representados en naranja y rojo) en todas las provincias y cuencas.