GRANADA, 22 de julio.

En un desenlace que ha captado la atención mediática y la preocupación de muchos, el hijo menor de Juana Rivas, la madre de Maracena condenada a dos años y medio de prisión, ha llegado al punto de encuentro familiar donde lo esperaba su padre, Francesco Arcuri. Este padre tiene la custodia del niño y está a punto de llevarlo a Italia, tras el rechazo del Tribunal Constitucional a suspender la medida de entrega solicitada por Rivas.

Cabe destacar que Arcuri está siendo investigado en Italia por supuestos malos tratos en el ámbito familiar, a raíz de las denuncias interpuestas por Rivas. Sin embargo, la Audiencia Provincial de Granada rechazó la solicitud de la madre para que se suspendiera la entrega del menor por ese motivo, insistiendo en el cumplimiento de las resoluciones judiciales vigentes.

En medio de una intensa expectación y rodeado de reporteros, el niño llegó de la mano de su madre y familiares al punto de encuentro. Juana Rivas, visiblemente angustiada, llegó abrazada por Paqui Granados del Centro de Información a la Mujer de Maracena. En ese momento, el menor expresó entre lágrimas su temor de regresar a Italia, mencionando que temía por su vida.

A las 11:00 horas, cuando finalizaba el plazo determinado por la autoridad judicial, el menor dio el paso hacia el punto de encuentro, donde lo aguardaba su padre. En todo momento, tanto él como Rivas estuvieron acompañados por la directora de Derechos de la Infancia y representantes de organizaciones que apoyan a Juana Rivas.

La llegada del menor al punto de encuentro puntualizó un clima de tensión y llamados al respeto por parte de los medios hacia la madre y su hijo. La semana pasada, el Juzgado de Primera Instancia número 3 de Granada recordó a Rivas que debía cumplir con la orden de reintegro de su hijo, quien ha estado con ella desde finales del año pasado tras haber denunciado supuestos abusos por parte de su padre.

El mismo juzgado se pronunció en un auto que no abordaba su propia decisión, sino la ejecución de una resolución anterior del tribunal italiano. Desestimó la solicitud de Rivas de escuchar al menor antes de aplicarse la resolución que exige su retorno con el padre, argumentando que tal audiencia no debería abusarse, ya que puede ser perjudicial para el niño.

En su decisión, el juzgado concluyó que la ejecución de la orden del Tribunal de Apelación de Cagliari, que otorga la custodia al padre y ordena la restitución del menor a su país, no es contraria al orden público español ni al interés superior del niño.

Es digno de mención que en enero, la autoridad judicial suspendió provisionalmente el regreso del menor a Italia tras las vacaciones de Navidad, lo que se debió a las alarmantes declaraciones del niño sobre haber sufrido violencia física y psicológica por parte de su padre, así como su narración del terror que sentía ante la idea de regresar con él.

La Audiencia de Granada respaldó en marzo la decisión de remitir el expediente judicial del niño a la corte de Cagliari para seguir investigando las acusaciones de malos tratos. Recordemos que en abril de 2021, el Tribunal Supremo ratificó la condena a Juana Rivas por el delito de sustracción de menores, aunque redujo su pena de cinco a dos años y medio de prisión, considerando que se trató de un único delito a pesar de que involucró a dos menores, uno de los cuales ya ha alcanzado la mayoría de edad y reside en España.