En un significativo paso hacia el fortalecimiento de las relaciones entre España y el Reino Unido, el presidente Pedro Sánchez y el primer ministro Keir Starmer han firmado un acuerdo marco estratégico que se centra en áreas clave como la defensa y el cambio climático.

Este importante encuentro, que tuvo lugar en Madrid el 3 de septiembre, marca un nuevo capítulo en la cooperación bilateral, especialmente tras la reciente conclusión del acuerdo sobre Gibraltar, que Sánchez calificó de "muy afortunado".

Ambos líderes hicieron mención de la trascendencia de este acuerdo alcanzado en junio y que ahora espera su ratificación final. Sánchez aprovechó la ocasión para felicitar a Starmer, destacando la relevancia que tiene esta cooperación en el contexto post-Brexit, donde las relaciones del Peñón con la UE son primordiales.

Starmer, a su vez, enfatizó el esfuerzo conjunto que ha permitido alcanzar este nuevo pacto, resaltando que las negociaciones han sido arduas y duraderas, superando los tres años de discusiones. La voluntad de ambos líderes de renovar sus lazos se ha visto reflejada en este diálogo productivo.

El encuentro también es notable por ser el primero entre un presidente del Gobierno español y un primer ministro británico en siete años, una situación que Starmer consideró "increíble". Ambos líderes, un socialista y un laborista, han manifestado su compromiso de trabajar juntos en desafíos globales como la crisis en Gaza y el cambio climático.

En sus breves declaraciones antes de la firma del acuerdo, Starmer subrayó la amistad entre las naciones y el impacto positivo de esta relación más allá del ámbito comercial, abarcando también la conexión entre sus pueblos.

La cooperación se extiende a temas vitales como la situación en Ucrania y los conflictos en Gaza, donde ambos políticos han expresado su unidad de criterios. "Estamos alineados en cuestiones globales esenciales", comentó Sánchez.

El marco estratégico firmado profundiza en varios ámbitos, como el crecimiento sostenible, la política de defensa, la cooperación judicial y la política climática, conforme detalló la Moncloa. Este acuerdo establece un camino claro para una relación más sólida y productiva entre ambos países.

Desde el punto de vista económico, el pacto prevé la creación de un entorno propicio para el crecimiento sostenible, apoyado por una nueva asociación comercial. Ambos gobiernos se comprometen a fomentar un sistema multilateral más robusto y a promover la igualdad de género y la defensa de los derechos de las mujeres.

En el ámbito de la seguridad y defensa, España y el Reino Unido han acordado intensificar su colaboración frente a amenazas contemporáneas como el ciberterrorismo y otros riesgos híbridos. Este acuerdo también incluye el desarrollo de una industria de defensa europea sólida.

Además, se ha establecido un compromiso en el ámbito judicial por el que ambos países trabajarán juntos para combatir la delincuencia organizada, el narcotráfico, y la violencia de género.

En lo que respecta a la política climática, ambos líderes han manifestado su intención de incrementar la colaboración para enfrentar el cambio climático y la pérdida de biodiversidad, proponiendo un aumento en las alianzas en diversos sectores, incluidos el turismo y la educación.

Finalmente, el acuerdo prevé que los ministros de Exteriores se reúnan anualmente para fortalecer esta asociación y supervisar el cumplimiento de lo pactado, lo que promete un futuro de colaboración fructífera entre España y el Reino Unido.